EL YO Y PODER SER

´SER´ ES MAS DIFÍCIL QUE LO QUE UNO CREE

DIARIO DEL GALLO
MIÉRCOLES 26 DE DICIEMBRE 2013

Ah que gusto me da saber que este show mediático de la Navidad está por acabarse.  Después de las compras, del trago, del festín, los abrazos los echamos al mar del olvido.  Ojalá hoy no se acabará de nuevo la fraternidad y no volviéramos a ser los mismos intolerantes marcados por la agresión y la falta de bondad.
Esta burla alrededor de la religión es un sabotaje a la humanidad.
Este borregaje en los centros comerciales es algo fatalístico.  Los citadinos van con el mismo afán y desespero como si nadie se atreviera a decir eso no soy yo.   La manipulación hacia el ahogo y la comercialización es algo que parece imparable.  La gente se cruzó de brazos, agachó la cabeza y se dió por vencida.  Estos días son para locos de manicomio y lo peor es que así seguiremos, con la vista puesta en el ojo de lo que los astutos llaman modernización.  Que falta de personalidad y carácter veo estos día a mi alrededor.
Hoy me levanto con el sabor más dulce que nunca al saber quién soy y por qué esta firme posición de no actuar como un borrego más.  Me reservo el derecho de ser yo.  Es hiriente atragantarse con el pensamiento de continuar la burla global mientras los que saben rien con macabridad.
Yo me digo... si la Navidad es un acontecimiento familiar pues que así sea y que no traten de disuadirlo a uno y no traten de hipotercale ideas fuera de lo que si debería ser normal.
Me pregunto si para el que no se alcoholiza esta fiesta no es otra cosa que 24 horas tediosas y aburridoras.  Otro encierro más.  Si para aquel padre de clase trabajadora no es esta una maldición más al observar los tumultos en tlas tiendas y centros comerciales gastando lo que el no posee para favorecer a los suyos.
Ya nadie se detiene a pensar cuál es el verdadero efecto de esta falsa realidad. 
Si la familia es lo importante pues no hay nada que agregar: los que disfrutamos de nuestras familias lo hacemos por lo que son y por lo que valen.  Diferente a formar parte de una aglomeración, que como vacas van a que las ordeñen sin ideas y sin horizonte más que el propuesto por su amo.
Es difícil ser quien se es, hacer sentir lo que se es, cuando los demás están empujando, tildando, tachando, excluyendo, señalando que ser lo contrario es error.
Tal vez lo bonito de un día como Pascua o la Navidad sea la búsqueda, el retiro.  La inagotable búsqueda hacia el magno universo de la intromisión, descubrirse en un tiempo, estado, espacio, época, momento, circunstancia, historia.
Ser y dejar ser.  Ser y seguir siendo.  Ser siempre más y no dejarse embolatar, ser y no limitarse a ser aquel animal que simplemente se limita a seguir.  Este es el fin porque ya nadie se atreve a decir no.  Si no hay nada que objetar sigamos pues a los demás, supongamos pues que somos una masa homogénea con pereza y que no hay nada que agregar.   



Oscar Darío Velásquez Lugo,
26 de diciembre 2013
Santa fe de Bogotá


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