miércoles, 7 de septiembre de 2011

SILENCIO QUE ESTOY DURMIENDO

DIARIO DEL GALLO
MIÉRCOLES 7 DE SEPTIEMBRE

PASAN LOS MESES, LLEGAN LOS AÑOS
No me alcanza el tiempo para nada...
'Tengo que volar a Col. y ayer me di cuenta que los de seguridad en el aeropuerto de Amsterdam estaban actuando paranoicos.  Nueve de septiembre, esa fecha la debemos olvidar'.
Debo confesar que los últimos meses ando muy atareado... Y es que no sepa lo que voy a hacer ni para donde voy.  Por el contrario, eso lo tengo definido.  El problema es que son varios actos realizables a la vez los que me impiden llegar hasta mi diario.
Lo que quiero expresar es que con esta adicción de escribir sucede lo mismo que cuando uno tiene una meta a cumplir o cuando uno se propone no hacer algo y al final de cada día recuerda y piensa: 'diablos' otro día y no pasa nada.  El sentimiento de culpa es grande.  Es tal y como cuando uno se promete no comer dulces de gula porque es consciente del mal que causan y de repente observas devorándote un pedazote de chocolate tan grande que hasta sientes cierta pena contigo mismo,(a).
Así parecido es lo que me atormenta cuando dejo este diario descuidado.
En la búsqueda de éxito en la modernidad nos requerimos llevar a cabo muchas tareas a la vez, y aunque uno sepa priorizar y dividir las horas pues el día no tiene sino 24, de las cuales unas están vendidas por ejemplo, al sueño, descanso, trabajo, familia y mantener vivas y en contacto las amistades tan importantes para el desarrollo y balance personal.
El Internet es un sistema práctico pero a veces presiento que a mí me está consumiendo y robando de mi propio tiempo pues con la información y redes a la mano uno se va convirtiendo en un esclavo pasivo de si mismo y de la angustia de los demás .
Mi cerebro me grita "hazme silencio, no me des tanto palo...  Dame paz, ya no quiero ni oírte pensar''.
Para que decir lo que no es: lo que deseo es encontrarle su tranquilidad, no alterarlo, que no termine ahogado en el stress cotidiano.
A veces me pregunto que eficaz sería si uno pudiese dividirse.  Si uno pudiera repartirse física y mentalmente y realizarse en varios estados al mismo tiempo.
Conociendo al humano de mi interior, creería que esta sería la causa de más tareas y más compromisos.  Esta sería la causa de aun más promiscuidad mental.
Gente con personalidad (.......), como la mía siempre anhelamos atarearnos más, realizarnos más y más y por ende lo que llamamos aprendizaje terminaría por llevarnos a la locura e insatisfacción porque creeremos estar incompletos, insatisfacción del saber, tanto físico como psicológicamente. 
"El intelecto es mi maquina voraz, una esponja inmensa en el cerebro insaciable que siempre está inquieta por llenarse más".
En el momento inmediato ser inteligente significa conformase con poco.  Desenvolverse entre lo mínimo, simple y concreto.  AHÍ ESTÁ EL MEOLLO.

Oscar Darío Velásquez Lugo
07-09-2011
Amsterdam

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