A 100 AÑOS DE LA INVASIÓN ÁRABE_MUSULMAN

DIARIO DEL GALLO

VIERNES 13 ABRIL 2018

A 100 AÑOS DE LA INVASIÓN  ÁRABE_MUSULMAN

Amsterdam cambiará Los Cabeza de Queso por los Hijos del Kebab

Para tener una vision del futuro y entender un poco el planeta ya no es imprescindible salir del barrio.  Aquí, por ejemplo, sambullido en mi propio barrio, tengo la información para saber cómo será Amsterdam en el año 2118, 100 años a partir de la fecha.

Holanda es un país tradicional, proteccionista, que vive en el embrollo de una monarquía de estilo social-capitalista. Bien, el caso de mi relato, está enfocado hacia la natalidad.  Si eso.  La proliferación natal.  No la de holandeses que es de 1 o 2 hijos por pareja. Contraria a la de inmigrantes árabes y musulmanes que es el doble, con un mínimo 3 y 4 hijos por núcleo familiar..

Siguiendo con mi tema, recuerdo que cuando yo llegué a Holanda en 1987 mis vecinos eran ‘Cabeza de Queso’, como llaman al holandés. Hoy al mirar por la ventana, en la calle, supermercado, tienda de víveres, tienda de teléfonos, bicileteria, panadero, modista, farmacia, bar, plazoleta, veo que estoy rodeado del infiltrado mundo árabes_ musulmán. 

En la escuela, donde hasta hace unos años mi hija se educara en una 'escuela blanca' entre niños holandeses, hoy con mi hijo es distinto.  Hoy la escuela tiene el color pluricultural.  Lo que llama mi atención es que pluricultural signifique polarización.  La escuela cambió el vestuario de la modiosas y  descomplicadas mamás holandesas en menos de 10 años.  Hoy invaden las túnicas, abrigos largos y pañoletas que usan turcas y musulmanas. Hoy los compañeros de mi hijo también son hijos de turcos y musulmanes. La invasión es palpable.  Mohamed se ha empeñado en poblar las grandes capitales europeas, lo que hace posible vaticinar que dentro de 100 años el dominio de la ciudad estará en otras manos.  En 100 años el holandés será una minoría acomodada a la cultura y reglas de los hijos del Corán.

Por el momento, Amsterdam continua el makeover para atraer turismo, lo que garantiza rentabilidad. A mi lo que también impresiona es que la ciudad se convirtió en show y que  la gente seamos parte del escenario, de este gigantesco museo llamado Amsterdam.

13-04-2018