SERES IMPERFECTOS... SEPT 1828

VONDEL PARK-Amsterdam

DIARIO DEL GALLO
JUEVES 25 DE SEPTIEMBRE 2014

BOLÍVAR IMPERFECTO... NI DIOS ES
Bolívar: eslabón perdido del pensamiento de la raza de América?

'Simón Bolívar was not crazy' 
186 AÑOS DESPUÉS... es apropiado comenzar aclarando que Bolívar, quizá el pensador e independista más grande nacido en América, no fue un Dios, ni un santo y mucho menos el hombre perfecto, (Esto para aclarar una idea que lo diosifica entre los fanáticos a la idea de libertad, independencia y revolución y que nos quiere hacer creer que el Libertador fue inmaculado como un super héroe de película).
Simón Bolívar, repito, no fue ni santo ni persiguió ni mucho menos pretendió la perfección como sus adeptos imaginan. Bolívar como otros virtuosos, es el ser de carne y hueso, que conoció tanto amarguras y tristezas como oportunidades y grandezas.
Bolívar fue aquel hombre que como yo y como usted comete faltas, que a veces actúa errado, y quien en sus momentos importantes como usted y yo, se exaltaba, ordenaba, gritaba influenciado por las personas y las cincunstancias.  Por eso, alrededor de Bolívar se tejen un sinnúmero de versiones que pretenden lucirse dejando en entre dicho las obra de este ilustre militar.
Ahora, cuál de nosotros podría acaso juzgar que se celebraban las victorias con fiestas y agasajos y que a veces una copa más de vino le haga tanto mal a una persona, y en este caso al General, que lo haga un patán desinhibido y conversador.
En este aspecto existen recuentos que pretenden tachar a Bolívar como el hombre promiscuo y mujeriego. A mí personalmente me entra la duda porque el legado de sus cartas y relaciones nos deja observar a un Bolívar cumplidor, seguidor de las leyes y compromisos.
El hecho es que la naturaleza de este genio debe verse dentro y fuera de contexto, ni más ni menos.
Bolívar como nosotros es un hombre con falencias y virtudes.
Pero tal vez es esta idealización de 'la persona perfecta' lo repercutió para que alrededor del personaje de Bolívar se haya acumulado celos, calumnia, vicio y anomalía.  Para por consecuencia, utilizar su desprestigio y tildarlo de déspota y egocéntrico. Llegado el caso, a Bolívar se le ha tratado de vil y despreciable dictador.  Pero una cosa es cierta, la propaganda fue funesta para derribar la imagen del Libertador.   Este punto controversial dio pauta para que allá en la capital, sus adversarios criollos y españoles, buscando acabar con su júbilo, su grandeza y el inmenso poder político, y tal vez en busca de revancha, aprovecharan el desprestigio para tratar asesinarlo la noche del 25 de septiembre hace 186 años.
Por fortuna, cada uno de atentados magnicidas septembrinos, incluyendo el de Soacha, fracasaron. Sin embargo, Bolívar, el hombre fuerte en las guerras, no pudo con la contradicción y la pugna.  El hombre débil e imperfecto quedó deshecho ante el poder del mal que es a veces más poderoso que la grandeza de un humano.
Ahora, podemos estar de acuerdo y sobretodo al elogiar su determinación en las batallas, su heroísmo casi patético, su entereza y carisma, su elocuencia y la estructura a la hora de plantearse un pensamiento.  Bolívar merece ser enaltececido dentro de su oficio como el excelente militar que fue.
Bolívar, el independista pensante, es el eslabón perdido de América Latina, en esto no podemos confundirnos pues sin Bolívar no habría un nuevo punto de partida ni de herencia.
Lo más importante, 186 años después de aquellos fatídicas noches septembrinas, es recordar que tenemos una firme idiosincrasia., que somos más de lo que nos hacen creer en este nuevo sistema global de vida, pues con la modernización , con el paso de las guerras mundiales, conflictos políticos y sociales se pretende desecharnos o meternos en el baúl del olvido.
Bolívar repito, (como Plato, Aristóteles y muchos de los emperadores que dieron forma a la cultura romana y occidental), es nuestro gran pilar y un significante eslabón que nos da pies para encontrar camino libre en este mundo desbocado y sin riendas.



Oscar Darío Velásquez Lugo
25-09-2014
Amsterdam


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